martes, 3 de febrero de 2009

BASTA UN POCO DE BIENESTAR PARA ADORMECER LAS CONCIENCIAS
Con estas palabras no pretendo provocar a nadie, sólo quiero mostrar aspectos de la realidad en que vivimos y que me resultan del todo inaceptables. Muchos piensan que las actividades de ETA son incomprensibles barbaries, pero yo pregunto, ese odio que demuestran hacia España no puede ser por que si. Tendrán alguna razón para llevar ese odio tan adentro. Una de esas razones puede tener su origen cuando, durante el franquismo, los profesores castigaban físicamente a los alumnos que se declaraban vascos y no españoles. Si en aquellos años se hubiera tratado de explicar a aquellos niños de manera educada la cuestión y no profanando sus creencias culturales o ideológicas, no estaríamos en la situación que estamos en la actualidad. No creo que ese odio de algunos vascos hacia España, como algunos defienden, sea fortuito.

En España estamos instalados en la confrontación permanente entre nacionalismo español y nacionalismos periféricos, o entre centralismo e independencia, a veces parece como si las otras opciones no existieran. Aun así, la opción federal o confederal, que ya en su día defendieron Francesc Macià o Andreu Nin, continua siendo hoy la opción más razonable para un estado plurinacional como el nuestro. Un estado federal y republicano dentro de una Europa confederal, con pleno respeto a los derechos de todos los pueblos.

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